Cuenca-Albarracín

14 de Mayo de 2009

Pues nada que nos hemos ido ha darnos un paseo la familia entera: Sony y yo, la kawa y la gordi (kymco).

LA RUTA: 719 kms.

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Salimos de Toledo el jueves 14 de Mayo de 2009 a las 12,30h. Cogimos la N 400 y pasando por Yepes (para esquivar la autovía A 4) llegamos hasta Ocaña. Volvimos a coger la N 400 y fue todo un suplicio porque había un tráfico tremendo, y encima, las obras no ayudaban.

Llegamos a Tarancón a las 13.50 h. Paramos a tomar una birra 0´0 y un pincho con chorizo que estaba tremendo. Retomamos el camino hacia Cuenca evitando en todo momento los tramos acabados de la autovía A 40, yendo por vía de servicio (lo indica así) y fuímos de vicio. Solos, y además la carretera está estupenda porque la estaban reasfaltando.

Llegamos a Cuenca a las 15.20, y nos recibió con unas gotas de lluvia. Nos refugiamos en el  Bar-Retaurante Los Arcos, en la Plaza Mayor. Comimos bien, de raciones. Había hambre y todo estaba bueno. Buen precio.

Tras la comida, nos dirigimos al Hotel Torremangana, de 4 estrellas, pillamos una oferta y además lo elegimos porque estaba céntrico y con parking. Está bastante bien.

Por la tarde noche, nos fuímos a dar un paseito por el casco antiguo de Cuenca. De día o de noche, siempre con encanto.

Nos encontramos con un montón de Ducati´s, y como no, en la puerta del Parador. No eran nacionales.

Tras el paseo, nos fuímos a cenar a la Bodeguilla de Basilio. Lugar pintoresco por su ambiente rústico y antiguo. Raciones de cocina de antaño. Siempre está lleno. Precio medio, pero merece la pena probarlo. Después a descansar.

Al día siguiente no fuímos por la N 320 dirección a Priego, a unos 60 km.

Un pueblo bonito en sí mismo, y por sus alrededores.

 Fué un paseo muy agradable por sus calles angostas y fachadas palaciegas que recordaban a otra época de mayor explendor.

Nos tomamos una cervecita pero nos fuímos porque no ponían tapa. Je, je.

Vimos la indicación del Convento de San Miguel de las Victorias y allá que fuímos. Un sitio agradable en un paraje arbóreo impresionante, para hacer una agradable picnic.

De vuelta a Cuenca, pasamos por el estrecho de Cañamares. IMPRESIONANTE. La pena es que hay muy poco espacio donde se pueda parar.

 Llegamos a Cuenca sobre las 14,30h. a una calle peatonal que se llama San Francisco, paralela a Carretería, estaba llena de bares para tomar cañas y un ambientazo en las terrazas de cuidado. Comimos en la Ponderosa. Buena comida, selecta, los mejores tomates que me he comido nunca, pates, embutidos, mollejas, oreja, todo bueno. y buen trato. Precio medio. Siempre que vaya a Cuenca, volveré.

Por la tarde se nos unieron unos grandes amigos, Beni e Inma, con la que salimos a cenar a un sitio que está muy cerca de la playa de Cuenca que se llama Recreo Peral. Muy bonito y se come muy bien. No es barato pero muy elegante, al borde del río.

Al día siguiente salimos en dirección a Albarracín. Lo intentamos a las 11h pero en la gasolinera nos dimos cuenta que un@ de nosotr@s había pinchado......Qué odisea. Preguntamos en 5-6 sitios y no arreglaban pinchazos de moto y encima me decían que aquello era Cuenca y que a lo mejor no encontrábamos nada. Por fin, pregunté a un motero y me dijo que junto al Alcampo me lo podrían arreglar..... Un tipo muy cachondo, pero al final lo arreglé yo y el mientras miraba. Total 12 euros pero hubieramos pagado más teniendo en cuenta que era Sábado y ya casi las 13h.

Por fin salimos por la carretera de Villalba de la Sierra hasta 6 km. antes de llegar a Tragacete(hasta aquí la carretera es genial) donde hay una carretera que indica Teruel y que los primeros 10 km son bastante malos pero soportables. Eso hasta que cambias de provincia y entras en Teruel en la que la carretera es una gozada y el paisaje ni os cuento. Pasamos por Frías de Albarracín, Calomarde, etc. Llegamos a Albarracín a las 15h más o menos. Unos 115 km.

Tras un paseito y cervecitas, comimos en el Restaurante "El Portal", todo rico, y nos volvimos despacito y paramos en el nacimiento del Tajo.

Estábamos algo cansados...

El paisaje precioso.

Otra paradita en el Ventano del Diablo.

Llegamos a Cuenca a las 20h. Una ducha y a bebernos toda la cerveza disponible.......No quedó tanta cuando lo dejamos. Fuímos a cenar, otra vez, a la Ponderosa, donde ya habíamos comido el día anterior. Después a tomar copas a la calle peatonal Dr. Galindez, en la zona de Carretería, estrecha y llena de garitos.

Tras varios acabamos en una que se llama La Calle donde había buena música, ambiente y muy buen trato.

 Al día siguiente, el Domingo, y con las cicatrices de la noche anterior, nos fuimos de vuelta a casa. Tuvimos que hacer alguna paradita para descansar un poco.

  Fué un fin de semana espectacular, por los lugares, ambiente y sobre todo la compañía.